En transporte por carretera, una "milk run" es una ruta o un horario de entrega que incluye muchas paradas para recoger o dejar productos en varios lugares. La palabra se supone que deriva de la práctica de los camiones de entrega de leche que hacen muchas paradas para recoger la leche de los granjeros y entregarla a los clientes en las ciudades. Una "milk run" se utiliza en el transporte por carretera para hacer entregas frecuentes a clientes múltiples con cargas más pequeñas, lo que es más eficiente que hacer viajes separados para cada cliente. El propósito principal de una "milk run" es optimizar la eficiencia del transporte mediante la consolidación de varios envíos en un solo viaje. En lugar de entregas individuales o recogidas, un transportista sigue una ruta fija, recogiendo mercancías de múltiples proveedores o entregándolas a múltiples clientes de manera sistemática. Al combinar envíos y maximizar la capacidad del vehículo, una "milk run" ayuda a reducir los costos de transporte, minimizar los traslados en vacío y mejorar la eficiencia logística en general. También fomenta la colaboración entre proveedores y clientes, ya que pueden compartir los recursos de transporte y beneficiarse de los ahorros de costos. Además, una "milk run" puede mejorar la confiabilidad de la cadena de suministro y reducir los tiempos de entrega mediante el establecimiento de horarios regulares de recogida y entrega. Proporciona una solución logística predecible y eficiente, especialmente para industrias con envíos frecuentes y repetitivos, como la automotriz, minorista y manufacturera.